Póker y la integración de la información: ¿cómo aprovechar mejor los errores de los principiantes?

Esta vez discutiremos un artículo sobre la psicología del póker escrito desde una perspectiva inesperada. Los autores del artículo buscan entender cómo la integración de la información difiere entre jugadores rentables y no rentables. En el póker, esta habilidad es extremadamente importante, ya que, como señalan los autores del artículo, es necesario equilibrar tanto la explotación de las tendencias del oponente como ocultar las propias. Teóricamente, se podría jugar de manera completamente aleatoria y ser incomprensible, pero entonces se sacrificaría cualquier rentabilidad. ¿Cómo equilibran los mejores jugadores la explotación de los errores del oponente y su propia imprevisibilidad?

Para entender cómo se analiza este aspecto del póker en el artículo, es necesario introducir dos conceptos que utilizan los autores:

  • Información privada: en términos simples, es aquella información que el oponente no puede conocer (por ejemplo, la mano que se tiene, pensamientos sobre acciones futuras, determinación del rango del oponente, etc.).
  • Información pública: es lo que todos los jugadores pueden ver (por ejemplo, las cartas del flop/turn/river, el bote total, las apuestas, etc.).

Como en muchos otros artículos, en este los autores utilizaron la función Observe y recopilaron información sobre las manos jugadas en mesas Heads Up. Esta vez se observaron tanto juegos de apuestas altas como bajas (no se detallan las apuestas exactas). En total, se recopilaron 1.7 millones de manos y se obtuvo una base de datos adicional con 9.2 millones de manos de juegos 6-max y full ring.

Se observó un aspecto bastante obvio para un jugador de póker en el juego Heads Up: la distribución de cartas no determina las ganancias obtenidas en una cantidad significativa de manos. La variación en el reparto de cartas, jugando suficientes torneos, puede igualarse bastante rápido y prácticamente solo quedará el factor de habilidad.

Los autores del artículo notan que los buenos y malos jugadores difieren significativamente en un solo aspecto: la integración o sinergia de la información. En términos simples, esto significa que los jugadores regulares utilizan mucho más eficazmente toda la información presentada y son capaces de integrarla en un todo mejor que los novatos.

En la tabla vemos las diferencias en el procesamiento de la información. Existen diferencias significativas solo en la segunda y cuarta partes de la tabla. En la segunda se muestra que los jugadores no rentables son mucho más reactivos (es decir, su estrategia se basa mucho más en lo que sucede en la mesa que en la teoría o en una comprensión abstracta del juego).

La parte más interesante es la cuarta de la tabla. Vemos una diferencia bastante marcada entre la capacidad de los jugadores no rentables y rentables para integrar toda la información presentada. En teoría, esto significa que a los nuevos jugadores les resulta mucho más difícil entender los estados del juego (acertar el rango en el flop/turn/river, el cambio de equity al caer las cartas, etc.). Este conocimiento y comprensión se pueden utilizar en la práctica. Los malos jugadores tendrán más dificultades para entender situaciones complejas, por ejemplo, jugar en botes ISONAI o 3BNAI, será más fácil convencerlos con faroles y, a menudo, su juego en estos botes será cercano al póker ABC. Los jugadores regulares deberían prestar atención a esto: si nos encontramos en una situación en la que es rentable tanto hacer flat como 3BNAI (o tanto check como ISONAI), por razones psicológicas, a menudo será más rentable elegir una jugada más agresiva contra jugadores peores.

¿Dónde es mejor jugar al póker?