Los objetivos y su establecimiento son una tarea muy importante, tanto en la vida como en el póker, pero debes ser muy cuidadoso, porque los objetivos “mal” planteados y formulados darán un resultado “malo” e “inesperado”. Sin embargo, el simple hecho de establecer correctamente los objetivos es una garantía inicial de buenos resultados, no en vano existe el dicho “un buen comienzo es la mitad del trabajo”. Al mismo tiempo, la correcta comprensión y formulación de los objetivos es un divertido juego psicológico, pero hablemos de todo desde el principio 😉
Resultado formulado positivamente:
Muy brevemente: Tu subconsciente no distingue las negaciones, es decir, si formulas un objetivo como “no comer en exceso”, tu subconsciente lo entiende como “comer en exceso”. Si formulas un objetivo como “no tiltear más”, solo tiltearás más. Todos los objetivos de póker se formulan en positivo, específicamente lo que queremos lograr o tener.
El logro del resultado depende solo de ti:
Un error común tanto en el póker como en la vida es establecer objetivos que no dependen de ti. Por ejemplo: ganar 100$ al día, pero puedes jugar 10,000 manos al día de tu mejor póker y aún así estar en negativo, puede que tengas muy mala suerte. Cuando te pones un objetivo que no puedes alcanzar directamente, esto genera una gran resistencia interna al no lograrlo. Otro ejemplo: leer un libro por semana. Este objetivo depende 100% de ti y puedes lograrlo con tu esfuerzo. O hacer un análisis de manos después de cada sesión, nuevamente un buen objetivo que depende solo de ti.
El objetivo debe coincidir con el objetivo principal:
En este caso, en el póker, el objetivo principal de un buen jugador ganador es tomar buenas decisiones, por lo que todos los demás objetivos no deben entrar en conflicto con el principal. Volvamos un poco a los ejemplos “malos” mencionados anteriormente. Digamos que te has fijado el objetivo de ganar 100$ por semana en el póker y ahora estás jugando en el sexto día. Estás +110$ y te sientes satisfecho porque parece que has alcanzado tu objetivo. En este momento estás jugando un bote importante, donde debes tomar una decisión agresiva, pero tienes miedo porque si pierdes, perderás gran parte de tus 110$, por lo que decides tomar una decisión no óptima para tratar de conservar las ganancias de la semana. En este caso, tu objetivo principal y el menor se cruzaron y el menor impidió alcanzar el mayor.
Resultado formulado específicamente:
Para lograr algo, necesitas saber exactamente qué quieres lograr. Digamos que muchas personas quieren sentirse felices, ser ricas, amadas o cosas buenas similares, pero eso es completamente vago e indefinido. La mayoría de las veces, si le preguntas a esa misma persona qué es la felicidad para ellos, o cuánto dinero necesitan específicamente y qué harán con él, solo se encogerán de hombros. Un colega me dice que quiere empezar a enseñar a la gente. Y yo le pregunto: ¿qué les vas a enseñar exactamente? ¿a cuántas personas? ¿cómo vas a enseñar? ¿dónde vas a enseñar? y él me mira con ojos perdidos 🙂 El objetivo debe estar definido hasta el más mínimo detalle. Lo mismo en el póker. Quiero ser un buen jugador, quiero ser “pokerpro”, eso aún no es un objetivo. Debes formularlo exactamente para ti mismo, decidir por ti mismo qué es un buen jugador, qué es “pokerpro”.
Verificación de resistencia
Puede sonar extraño, pero a menudo en cada problema, por ejemplo: fumar o el sobrepeso, hay algo valioso para nosotros, por lo que nos resulta tan difícil “dejar de fumar” o “adelgazar”, por lo que antes de establecer estos objetivos, necesitamos averiguar qué nos ata a esas cosas negativas. Por ejemplo: pienso que cuando deje de fumar ganaré peso o que cuando deje de fumar no sabré qué hacer en situaciones de estrés, qué hacer durante los descansos de las clases. Con el peso siento resistencia a “adelgazar” porque entonces no podré comer mis dulces o chocolates favoritos, o estaré obligado a correr, lo cual no me gusta. Lo mismo en el póker, quieres “no tiltear más”, o tal vez sería más preciso decir que quieres “tomar buenas decisiones todo el tiempo”. Piensa en lo que perderías si alcanzaras este objetivo. ¿A qué estás atado? ¿Crees que entonces será aburrido jugar? ¿Que el póker perderá su diversión y sensación de adrenalina? ¿Crees que al mismo tiempo desaparecerá la alegría de las victorias? Las respuestas son muy específicas e individuales. No hay respuestas correctas o incorrectas, solo están tus respuestas que te “protegen” de alcanzar el objetivo.
¿Dónde es mejor jugar al póker?
Importante en el póker:
Evita los objetivos financieros, al jugar al póker tu objetivo es tomar buenas decisiones en el póker, no el dinero (las decisiones dependen directamente de ti, pero las fluctuaciones monetarias están completamente fuera de tu control).
Cómo establecer objetivos:
- El resultado debe estar formulado positivamente.
- El resultado debe depender directamente de ti.
- Resultado formulado específicamente y muy, muy detalladamente, si el objetivo es muy grande es mejor dividirlo en objetivos más pequeños.
- Debes saber muy bien qué sucederá cuando alcances el objetivo, es decir, ¿cómo sabrás que el objetivo se ha alcanzado? ¿qué verás? ¿qué escucharás? ¿cómo te sentirás? ¿cómo te verás?
- Verificación de resistencia. ¿Perderé algo importante para mí al alcanzar el resultado?
Ejemplos de objetivos de póker:
- Leer el libro de póker “how to be the poker player” en un mes.
- Analizar al menos una mano de póker de mis límites de SnG cada día.
- Hacer un breve resumen y análisis después de cada sesión.
- Ver uno o más videos educativos de póker por semana.
- Durante esta sesión jugaré el mejor póker que pueda.
Para concluir:
Esta información es muy útil no solo en la mesa de póker, sino también en otras áreas de la vida y otras actividades 😉